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Por el arroyo pasa el agua, serena pasa,
los murmullos alegres, de sus aguas,
como amorosos cantos de suaves tonadas,
sus ecos se recogen en sus cristalinas aguas.
Con suaves roces, que no decrecen,
el ruiseñor con sus trinos nos levanta,
las raíces de los pinos agua buscando van,
y como sarmientos en las peñas se enlazan.
Por el musgo, los mosquitos se desplazan.
siempre suben y bajan, batiendo sus alas,
buscando alimento, toman formas extrañas,
Que hago aquí le pregunto, a mi Alma,
solo veo un torbellino de troncos y plantas,
fuegos fatuos se elevan y en el aire divagan.
La Victoria 23 de abril 2001
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Poemas de Jose Joaquin Muñoz Castro:
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