Welcome/Bienvenido/Benvingut
Welcome/Bienvenido/Benvingut

El rincón literario: Firmado, sellado y aprobado

Estaba yo sentado en aquel hall de espera, mirando los cuadros que me resultaban insulsos y deprimentes. Escuchaba las voces en el consultorio que rebotaban en las paredes Pensé "que clase de locos estarán adentro" Agarre una revista, estaban los ricos mostrando sus casas. "Gente de pijas chicas, necesitan casas grandes" me había dicho un amigo. Me entretuve con eso hasta que se abrió la puerta. Salio una nena de unos ocho años y su madre gorda y despeinada detrás. La nena lloraba y la madre la llevaba de la mano como si la vida se le fuera en ello. Pasaron junto a mi y salieron a la calle el sol todavía brillaba y yo me sentí peor. Vi un poco de aquel consultorio, había luz tenue, se me antojo enfermiza, me hizo sentir con fiebre, pensé "esto no es una buena idea" La voz salio de allí con el mismo eco de las anteriores, dijo: "Por favor, pasa y cerrá la puerta" y aunque no quería lo hice. Me senté en una silla enfrente a ella, un escritorio recargado de fotos nos separaba. Los portarretratos tiraban reflejos justo en mi cara, era mortificante y me distraía. No creo que allá sido casual, ella sonreía pero no me transmitía ninguna sensación en absoluto. Era como los cuadros y las revistas, una cosa pintada y establecida, algo reglamentario, muy social y neutral. Me dijo que me calmara y comenzó con las preguntas, no me mando a ningún sofá tipo cama ni nada, todo sucedió allí, yo en mi silla y ella en su sillón y los reflejos jodiendo y su voz rebotando.

"¿Porque peleaste con ese chico?" "¿Lo odias o odias a alguien de tu familia?" "¿Fue una manera de descargarte, de transmitir tu frustración?" "¿Tenes sentimientos agresivos y violentos contra los maestros?" "¿Porque escribís esas cosas taaaaaaaaan tristes?" (Quiso ser divertida con esta) "¿No te gusta la escuela?" “Me dijo tu profesor que dormís en su clase, ¿No podes dormir en tu casa?" "¿Los pantalones rotos significan algo?" “¿Dibujas cosa feas y oscuras por algo que pasa en tu casa y esa es tu vía de escape?" "¿Te drogas?" "¿Tomas alcohol?" "¿Te gustan las chicas?" "¿Te gustan los chicos?" "¿Sos virgen?" "¿Sos gay?" "¿Te tocaron?" "¿Te pegaron?" "¿No te escuchan?"

Yo respondía despacio y pausado, no me gustaba ese lugar y pensé que si la mandaba a la mierda estaría más tiempo y habría mas preguntas. Decía "Si" y "No" y de tanto en tanto algún "Tal ves", estaba seguro que en realidad no importaba mucho lo que dijera, ella ya tenia su imagen de mi, las preguntas eran rutina, supongo que su vida también.

Nunca habían abusado de mi, ni mis padre ni nadie, pero ella volvía sobre ese punto y se ponía aburrida.

Le dije "Nunca nadie me hizo nada de todo eso, por favor deje de preguntarlo, es muy desagradable" Pero continuo y continuo, tenia imaginación y era muy explicativa. Cuando finalmente se dio cuenta que no servia de nada empezó con lo de "Te gustan las chicas o los chicos" y después "Pero estas más tiempo con los chicos ¿no? ¿no? ¡¿no?!" y volvía a decirle que en realidad me daba lo mismo estar con los chicos o con las chicas, no era muy bueno en eso de ser sociable, pero no lo entendía.

"¿Te gustan las chicas?" "¿Te gustan los chicos?" "¿Sos virgen?" "¿Sos gay?"

Realmente era demasiado, decidí arriesgarme y responderle a lo Arnaldo, el de verdad, el que a ella no le interesaba:
"¡¡ME GUSTA COGER CON CHICAS, HE COGIDO CON CHICAS Y A ELLAS LES GUSTA, LES GUSTA QUE SE LA META, ENTIENDE!! ¡¡¡ENTIENDE MAL COGIDA DE MIERDA!!! ¡¡¡¡ENTIENDE, NO SOY GAY, NO ME PEGARON, ME GUSTAN LAS MINAS, ME GUSTAN MIS PANTALONES ROTOS, ME GUSTAN MIS DIBUJOS Y ME GUSTA ESCRIBIR PORQUE SIMPLEMENTE ME GUSTA!!!! ¡¡¡¡ENTENDES AHORA!!!! ¡¡¡¡ENTENDEEEEEES!!!

Pero no lo hice, no tenia el valor para arriesgarme a visitar un loquero.

Me imagine babeando y con pantuflas de papel por los pasillos de algún hospital.

Cuando mire me di cuenta que me había quedado callado bastante tiempo, lo suficiente para que en la mirada de ella apareciera la duda y la desconfianza. Corto el nexo y bajo la vista. Anoto algo en una libretita, tal vez

"Chico idiota con serios problemas de comunicación, tal ves virgen o puto o algo así"

Levanto la vista y mostró esa sonrisa muerta, como de cartel de hotel barato. Volvió a anotar algo en esa libreta y se levanto. Salio del consultorio y me dejo solo, me temblaban las manos y tenia ganas de vomitar.

Todo esta mierda por cagarme a trompadas con un pendejo boludo y el estaría ahora tranquilo en su casa, comiendo tostadas frente a la tele. No se cuanto tiempo paso, sentía que fueron horas y horas (aunque debían haber sido diez minutos, el miedo estira el tiempo) hasta que ella volvió.

Trajo una carpeta y saco varios dibujos. Me los mostró de a uno y yo debía decir que veía. Eran dibujos de mierda y en blanco y negro, pensé que el artista no se había esmerado demasiado. "Veo dos tipos golpeándose" Ella dijo: "Mhmmm, interesante" Pero de interesante no tenia ni mierda.

Y continuamos hasta que no hubo más dibujos. volvió a anotar en la libretita, volvió a sonreír, volví a sentir fiebre. "En realidad...mhmmm...bueno, a ver...si...esta bien...si...mhmmm...bueno" Hablaba para ella, se mantuvo así un rato pasando de la libreta a una carpeta, comparando y anotando. No se como ni en que momento puso su mano sobre la mía, me miro fijo y mostró dientes manchados de tabaco.

No era fea, tendría 40 años, pero cuando sonreía estropeaba todo. Debo admitir, me dio un poco de miedo, no decía nada y me miraba fijo, todos esos dientes, amarillos, carroñeros. "No te preocupes, esta todo bien, sos un chico normal, un poquito antisocial pero nada mas, evita las peleas y la violencia y cualquier cosa me venís a ver ¿Si?"

Casi me caigo de la silla, casi grito, casi digo "PSICÓPATA HIJA DE PUTA, TODO ESTO, TANTA TORTURA SOLO PARA DECIRME QUE SOY NORMAL"

En realidad lo de que soy normal no se bien si fue bueno o malo.

Normal como los tipos que solo quieren llegar a su trabajo y si te ven tirado te patean.

Normal como los policías que matan de día y duermen de noche. Normal como un tipo en una fabrica volviéndose loco.

Normal como los viejos que vivían amargados y resentidos.

Normal como un almacenero. Como un enfermero. Como el enterrador. Como un abogado.

¿como que?

Pero en realidad no importaba, ella se levanto para darme la mano y despedirme, ya no mostró la sonrisa, el trabajo estaba echo, yo era normal, sólo había sido una falsa alarma, el chico era normal.

Ahora podía reincorporarme a la sociedad, entre los cuerdos y los buenos. Yo era normal, no importaba lo que dijera, hiciera, escribiera o con quien cogiera, era N-O-R-M-A-L, firmado, sellado y aprobado. pensé en todos los muertos por negligencias y guerras, pensé en todos los chicos violados o mutilados por los normales y buenos viejos de las plazas. pensé en médicos llegando ebrios, pensé en jueces y cámaras de gas, pensé en Galtieri, pensé en tipos comiendo de la basura, pensé en niños con las panzas hinchadas. Llegue a la calle y salí muy rápido, tenia 16 años, tenia algo que ver en la tele, tenia un millón de chicas en la cabeza, tenia que saber el nuevo hit, tenia mucho que hacer, pero principalmente, tenia que parecer normal.


Arnaldo Sejas (Ellarvarecords@hotmail.com)

25 de enero del 2005

Sobre el autor:
Arnaldo Sejas es de Necochea (Argentina) y ha publicado dos libros, ambos por medio de editoriales independientes y fanzines. El primero, titulado Nuevos milagros del 2000 para pendejos embotellados (1999) y el segundo, titulado Poesías para el después (2002).

Otros relatos y poemas mandados por Arnaldo Sejas:







 
www.polseguera.com - © Polseguera. Todos los derechos reservados

info@polseguera.com